Por Catherine L’Ecuyer
¿Por qué los niños de hoy en día se ponen a correr, asustados, cuando les cae una gota? ¿Por qué tienen miedo a la humedad y al frío? Porque existe una creencia popular falsa que los niños contraen resfriados y gripes cuando están fuera en invierno. «Es más fácil romper un átomo que un prejuicio», decía Einstein.
A pesar de la creencia popular, la Academia Americana de Pediatría (AAP) nos dice que el frío no es en sí causa del resfriado o de la gripe. De hecho, nos dice la AAP que si los resfriados y las gripes son más comunes en invierno, es porque los niños no salen de sus clases en las que no hay circulación de aire y están en contacto entre ellos, lo cual favorece la transmisión del virus. .
Así que para luchar contra el resfriado y la gripe – y de paso tener niños más resistentes a la frustración y a la dificultad- habría que dejarles, eso si, bien abrigados con un buen jersey o dos y un chubasquero, correr al aire libre pisando los charcos con sus botas de lluvia. De hecho, eso es lo que suele pasar en la gran mayoría de los países nórdicos en los que los niños acuden a los patios con 40 grados bajo cero…
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El patio de la escuela privada Ursulines de Québec |
La buena noticia es que se trata de un excelente plan para los días lluviosos en que pensábamos que no había otra alternativa a tener a los niños encerrados en casa o en su clase, como leones enjaulados. Si, existe otra alternativa. Y es mucho más sana que anestesiarles con películas, durante los días de lluvia de nieve, de tormenta o de helada al año reportados por la Agencia Estatal de Meteorología del Gobierno de España (82 en Barcelona, 99 en Madrid y 165 en Bilbao).
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Publicado por Catherine L'Ecuyer
Investigadora y divulgadora de temas educativos. Autora de Educar en el asombro / Researcher, writer, speaker & bestselling author of The Wonder Approach /
Chercheure, conférencière et auteure du best-seller Cultiver dans l'émerveillement
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Muy interesante y práctico este artículo. Fácil de poner en práctica y sí, rompe algunos esquemas, pero te invita a ver lo de siempre con ojos de posibilidad… Gracias
M Pilar Ruiz
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Decía un amigo mío que la gente está dispuesta a creerse cualquier cosa, con la única condicion de que sea falsa. Es increible cómo sobreprotegemos a los niños acabando por perjudicarles. Así son mejores consumidores: de calefacción, videos y pastillas antidepresivas y ansiolíticos. Todo un éxito educativo. Me parece que te voy a citar en el próximo libro que estoy escribiendo. Gabriel ginebra
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Me encanta que por fin haya alguien dispuesto a decir que jugar bajo la lluvia (no demasiado intensa) es beneficioso para la salud! Durante esta Semana Santa ha sido perfecto poder poner en práctica lo de las botas y el chubasquero y decirte que los parques estaban vacios de niños… y llenos de charcos que esperaban compañia!
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Esta Semana Santa (y desde hace ya tiempo) hemos vuelto a poner en práctica las salidas al campo lloviznando y tras una lluvia abundante, ha sido fantástico!!
Alba S
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Efectivamente el miedo a no s emuy bien qué se apodera de todos cuando nuestros niños están bajo la lluvia. Pero lo peor es que en los colegios también. Los pequeños son recluidos en el aula con la peli de turno impidiéndoles disfrutar del arire libro, de chapoteart, de comprobar el efecto del agua sobre la calzada, etc. Aprenden menos y son menos felices. Si se mojan se les cambia y punto y no se pasan más de medio año encerrados.
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Recientemente, he leído (aunque no encuentro ahora la referencia) que en realidad lo que favorece el contagio del virus del resfriado o la gripe es la sequedad de las mucosas. El frío hace que disminuya la concentración de vapor de agua en la atmósfera, aunque también la calefacción. Lo mejor para evitar el contagio dicen que es tener las manos limpias.
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